Datos:
Título del libro: Las dos caras de
la luna.
Autor: J.J. Lobos.
Editorial: GD Publishing
ISBN9783960286479
Número de páginas: 296
Año de publicación: 2016
Sinopsis:
Grasmere, Distrito de los Lagos,
Inglaterra; ni los vampiros ni los hombres lobo esperaban que en ese pueblo se
descubrieran los orígenes de la guerra que los había dividido por mil años. La
joven Johanna sólo quería continuar con su vida como una estudiante normal, no
convertirse en la tutora de los dos chicos nuevos; mucho menos quedar encerrada
en la batalla que hasta hace poco era sólo un cuento de niños con sus dos
nuevos amigos.
Mi opinión:
Primeramente, decir que me siento
bastante mal por estar tan alejada del mundo literario, pero que me parta un rayo
si he tenido tiempo para otra cosa que no sea el trabajo…es más, este sábado
que pasó me caí en la calle y tendrían que haber visto mi rodilla, llena de
bolas hasta en la espinilla y toda morada. Por fortuna, la hinchazón ya bajó y
ya puedo caminar, falta que se me quiten los moretones (los cuales ya me llegan
hasta el tobillo) >.<
Pero bueno, pasemos a lo
interesante.
Otra novela autopublicada, aunque
esta vez, del género fantástico. Tengo que admitir una cosa: esperaba más de la
obra, pero tampoco puedo quejarme, porque una vez le agarré el gusto, lo cierto
es que no pude soltar el libro.
Hay que reconocer que la narración del
texto es bastante primeriza. ¿A qué me refiero con esto? Bueno, intentaré
resumir un tema en el cual podría llevarme todo un artículo…cada trabajo
(novela, poema, ensayo, etc.) tiene su propio tono y ritmo. Ciertamente, los
personajes y la trama son una de las principales cosas por las que una novela
puede o no ser atractiva, pero también hay que incluir a la narración.
Cuando la narración es novata o le
falta trabajo, se nota en los cambios de tono del narrador, pasando de ser muy
explícito a escueto, de hilarante a
serio. Ojo, no estoy diciendo que el drama, la comedia, el terror o el suspenso
no puedan manejarse juntos en una misma novela, simplemente que el narrador debe
tener su propia forma, su propio estilo, ritmo y tono. Y eso es lo que le falta
a esta narración: algunas descripciones son confusas, hay hechos que habría
sido mejor plasmarlos tal cual que resumirlos, diálogos que intentan ser
ingeniosos pero que se quedan cortos (de hecho me recordó a «Cultre», mi
primera novela).
No obstante, creo que este aspecto
se ve compensado, en parte, por los personajes. Aquí no hay trío amoroso
(¡Gracias, gracias, gracias!), sino más bien tres amigos que aprenden a
convivir entre sí, y es que son bastante diferentes. La temática de la amistad
me ha encantado, o sea, se ve la evolución, los estira y afloja aunque en mi
humilde opinión, me hubiera gustado conocer más de cerca las emociones de los
personajes, ya que a pesar de que al inicio esto es bastante palpable, con el
paso de la historia el lado emocional se ve un tanto opacado.
Lo más interesante es la trama.
Quizá no sea la octava maravilla, pero sí que me ha gustado los giros de tuerca
que tiene, o sea, es lo mismo pero no lo es, tiene elementos sumamente clichés,
pero al mismo tiempo hay toques muy especiales, muy característicos, que son
los que dan el sazón a la obra.
¿Recomendable? Sí, si lo que buscas
es distraerte, pasar un rato ameno y divertido. De esos libros que te ayudan a
desestresarte y desconectarte un ratito de la acelerada realidad ;-)
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